Los buenos resultados obtenidos en campañas anteriores, con la recuperación de un total de 125 hectáreas, han animado al Banco de Tierras y a la Denominación de Origen Bierzo a seguir en la misma línea e iniciar esta campaña para aumentar la superficie de viñedos en la comarca. El presidente del Consejo Comarcal, Gerardo Álvarez Courel, la presidenta del Consejo Regulador de la DO Bierzo, Misericordia Bello, y el técnico de la Asociación Berciana de Agricultores, Pablo Linares, explicaron este miércoles algunas de las novedades.

Las principales son la colaboración con todas las bodegas para conocer sus necesidades y propuestas, así como su colaboración para ampliar los canales de comercialización de los productores usuarios del Banco de Tierras; intensificar la participación de ayuntamientos y juntas vecinales; ofrecer charlas para concienciar a los propietarios de la importancia de que las viñas sigan siendo productivas e intentar recuperar el viñedo abandonado si existe viabilidad técnica.

El presidente del Consejo explicó que el tipo de contrato formalizado en anteriores campañas fue el de cesiones de uso precario. “El propietario de un viñedo productivo principalmente quiere que su viña sea atendida y a lo sumo vendimiar un par de cestos de uva para autoconsumo”, afirmó Gerardo Álvarez Courel. No obstante, el Banco de Tierras tratará de lograr este año otro tipo de acuerdos como compra-ventas o arrendamientos de duración más larga. También la posibilidad de sembrar variedades más rentables o tramitar nuevas plantaciones.

125 hectáreas de viña recuperadas

La labor realizada a lo largo de anteriores campañas ha evitado el abandono de 125 hectáreas de viña en la comarcas, todas ellas adscritas a la Denominación de Origen Bierzo. Gerardo Álvarez Courel recordó que los viñedos suponen el 40% del total de las fincas arrendadas hasta el momento por el Banco de Tierras. “Con estas nuevas propuestas esperamos alcanzar unos mejores resultados, que redunden en beneficio del sector vitivinícola”, deseó el presidente.

La campaña finalizará en marzo para que todas las viñas adjudicadas puedan ser podadas dentro del período agrícola preceptivo. Irá acompañada de una campaña de concienciación y de jornadas técnicas y cursos de formación. El presidente hizo un llamamiento “a todos aquellos propietarios de viñedos que no vayan a seguir atendiéndolos o que hace algún tiempo que ya no los trabajan que permitan a otras personas trabajarlos con la garantía de protección de su propiedad que el Banco de Tierras les proporciona. Así mismo hacemos un llamamiento a todas aquellas personas que necesitan ampliar su superficie de viñedo a que se acerquen al Banco de Tierras a consultar las fincas disponibles”.